La teoría de la homeopatía sostiene que una misma sustancia tóxica que provoca una enfermedad puede ser la base, administrándola en su correcta dosis para acabar con esa misma enfermedad. Este principio es enunciado como: "lo semejante se cura con lo semejante".
No soy un gran seguidor de estos remedios, y no es mi intención discutir acerca de la efectividad o no de esta pseudociencia médica (en otro post quizás), sino que tan sólo pretendo poner de manifiesto como nuestros líderes han debido de tomar este principio como dogma de fe, y no sólo en el ámbito médico, sino también en el económico, pues está es la única forma en que consigo llegar a explicar las medidas que se llevan meses tomando para atajar la crisis…
Como todos conocemos ya de sobra, la crisis que estamos atravesando tiene como primera causa una sobrevaloración del precio de la vivienda en EEUU y de los productos financieros derivados de esta.
Esta burbuja inmobiliaria fue consecuencia inmediata de la disponibilidad prácticamente ilimitada de crédito y de la cultura del apalancamiento como forma de vida, alentada por los bancos centrales y por todos y cada uno de los agentes del mercado, sí nosotros también, no fue solo culpa de Greenspan, ni de los banqueros, ni de la SEC, aunque ellos tuvieran la mayor parte de la responsabilidad.
Pues bien, según parece la solución a esta "enfermedad", provocada por este exceso de crédito, es sencillamente más crédito. Pura homeopatía aplicada. Fascinante.
Aquí os adjunto un gráfico en el que podéis ver la evolución de los tipos de interés en EEUU, como podéis ver, igual que ahora, para salir de la crisis de las .com también se bajaron considerablemente los tipos de interés, lo que contribuyó a crear el campo de cultivo para la burbuja inmobiliaria y bursátil.
Las burbujas financieras se suceden unas tras otras y nuestras soluciones una y otra vez pasan por lo mismo: bajar los tipos de interés e inyectar más masa monetaria al sistema para sostener la insostenible situación…
Puede que las recientes medidas del amigo Timoteo fueran necesarias a corto plazo para salir del atolladero en el que nos encontrábamos… pero en mi humilde opinión, a largo plazo todo esto solo puede acabar de una forma: con otra burbuja. Nadie sabe ahora cuál será ni cuando estallará, pero a no ser que el ser humano invente algo mágico en los próximos años/meses algo que dispare la riqueza real, la burbuja está servida. Y tengo la sensación de que ese invento es bastante improbable…
En resumen, que desde mi punto de vista, en lo que se refiere al apacalancamiento excesivo, "lo semejante no cura a lo semejante"
lunes, 20 de abril de 2009
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2 comentarios:
Habla este comentario sobre la burbujas, hay muchas si, se suceden unas tras oras como los niños soplando tras un aro de plastico untado en jabón. Y se seguiran sucediendo una tras otra, prosperidad, crisis, prosperidad, crisis. Ciclo tras ciclo, impepinable.
Claro que el problema es otro. El problema ahora es que no hay crédito. Cero patatero. Ni un duro. No si es que mi empresa va bien. Si ya pero por si acaso busque en otra ventanilla.
La diferencia es que los banco estan tan acojonados ue no prestan sino a aquel que no lo necesita.
El problema no es que los estado inyecten liquidez, sino que no ueden, porque los bancos están cerrados a cal y canto.
Quieres dinero, cava profundo igual lo encuentras.
El tio de Jo.
Muy sabio comentario tio, como siempre! esperamos verte más a menudo por aqui!
De todas formas esta restricción del crédito es la respuesta normal después de los excesos que se han estado prácticando en los últimos años...
Lo que critico es que a veces parece que no queremos que estos excesos cesen... parece como si el problema fuera simplemente que ahora no hay suficiente crédito... cuando el verdadero problema no es ese, sino el exceso de crédito que hubo previamente, eso es lo que nos llevado a esta situación...
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