Antes de empezar, debo aseguraros que la historia que se cuenta a continuación no es ficticia; es real. Se que a muchos os costará creerla. Pero os garantizo que lo que aquí se cuenta, de verdad está ocurriendo.
Nuestra historia transcurre en una de las localidades más conocidas por toda la juventud europea: Ibiza, un soleado paraíso de playas, fiestas y discotecas, una de las ciudades más cosmopolitas y abiertas del mundo, dónde se juntan gentes de todas las nacionalidades del planeta, en busca de ocio y diversión.
En esta isla vive un niño de 11 años, llamado Olav. Padece de dislexia. Asiste diariamente al Instituto Público Cervantes. Hasta aquí todo normal. Pero como en toda historia de Ciencia Ficción, todo debe parecer de lo más habitual, hasta que aterrizan los alienígenas. Que es ahora. Los que se asusten con facilidad, tal vez deberían dejar de leer. El que avisa no es traidor.
Bien. La lengua materna de Olav es el castellano. Pues resulta que los directores y profesores de ese centro público de enseñanza, financiado con el dinero que el Estado Español transfiere a las comunidades autónomas, le impiden examinarse en castellano. El asunto ha llegado a manos de la Consejería de Educación de la Comunidad Autónoma de Baleares, quien hizo caso omiso. La cosa fue más allá. En un exámen de la asignatura de Conocimiento del Madio, Olav cometió el terrible error de escribir la fecha en castellano. La profesora le penalizó con -0.5 puntos en la nota del exámen.
Podéis leer toda la noticia aquí: http://www.elmundo.es/elmundo/2009/04/21/baleares/1240348335.html
A las personas a las que éstos hechos no les levanten ampollas, les recordamos el artículo 3.1 de la Cosntitución Española:
“El castellano es la lengua española oficial del Estado. Todos los españoles tienen el deber de conocerla y el derecho a usarla.”
No entraremos en política, pero hace 6 años, un petrolero llamado “Prestige” encayó en la costa gallega, y por accidente, vertió su contenido en aquellas aguas. Las manifestaciones de protesta por la gestión de aquel accidente se sucedieron durante meses por las calles de todo el país, llegando a nacer un movimiento llamado “Nunca Mais”, que pretendía denunciar aquellos acontecimientos.
Pues bien. Estamos ante una flagrante violación de las leyes, y nadie hace nada. Nadie. Los medios de comunicación y la sociedad se llevan las manos a la cabeza con el vacío legal de Guantánamo (que en mi opinión merece toda condena social), y en nuestro propio país se pisotea la Constitución y los derechos fundamentales y nadie, ni políticos, ni jueces, ni colectivos sociales, ni la mayoría de los medios, dice una sola palabra.
En mi opinión, el Tribunal Constitucional debería dejar a un lado absolutamente todo lo que esté haciendo en estos momentos, y ponerse a tratar este caso, y dictar las penas e inhabilitaciones correspondientes por este escándalo social.
Produce verdadera hilaridad escuchar a nuestros políticos hablar del G20, G8, Unión Europea, Naciones Unidas, etc… ¿Cómo un país en el que resulta tan sencillo violar la ley puede pretender ser tomado en serio por estos organismos democráticos?
MiB: Dana Mattioli on Amazon’s Everything War
Hace 3 días
2 comentarios:
q asco de pais...
El error o la cuestión de que el TC no se haya pronunciado al respecto se debe entre otras cosas a la negativa del Gobierno a incoar un recurso de inconstitucionalidad contra la ley concreta que decretó la enseñanza en catalán, o en las islas Baleares más recientemente, o en Galicia en su momento con las 'galescolas'. En un caso se debe a la inacción del Gobierno de Aznar en su momento y en el otro al de ZP.
El problema que en mi opinión subyace es que la Ley Electoral otorga excesivo poder a los nacionalismos y eso a la hora de legislar pesa bastante, porque al final ellos al negociar tienden a compensar unas cosas por otras.
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