Viene de Joan Laporta: historia de un éxito I
Durante el verano de 2006 acontecieron elecciones a la presidencia del Futbol Club Barcelona. Laporta y su junta directiva pretendieron por toda vía retrasarlas hasta el siguiente año, 2007, alegando una muy discutible interpretación de los estatutos blaugranas. La disputa requirió la intermediación del juez del juzgado de instrucción de Primera Instancia número 30 de Barcelona, Roberto García Ceniceros, quien dictaminó que la celebración de elecciones debía ser ese mismo 2006, pese a los intentos de Laporta. Ante la no concurrencia de ningún otro candidato a la presidencia, Laporta era nombrado presidente por 4 años más.
La temporada empezaba con el Barcelona partiendo como claro favorito para los tres títulos, contando con la dupla Ronaldinho – Etoo, y un incipiente Messi. El Real Madrid, al que recientemente había llegado Fabio Capello de la mano de Ramón Calderón y Pedja Mijatovic, había confeccionado una de las plantillas más mediocres de su historia, lo cual allanaba el camino del Barcelona. Contra todos los pronósticos, y tras perder bochornosamente 4 – 0 frente al Getafe en Semifinales de la Copa del Rey, el Barcelona completó un año en blanco, dejándose ganar la Liga por el Real Madrid en el último partido.
La siguiente campaña 2007 – 08 se fichó por 27 millones de euros a Henry. El fichaje fue muy cuestionado, debido a la avanzada edad del jugador por, entre otros, la antigua mano derecha de Laporta, Sandro Rossel. Esa temporada, Barcelona volvía a fracasar en todas las competiciones, cayendo 4 – 1 frente al Real Madrid. La hinchada empezaba a estar verdaderamente harta de la gestión infructuosa de Joan Laporta, hasta el punto de forzar la convocatoria de una moción de censura.
La junta de Laporta trató de que ésta se celebrase durante el verano, y no en día de partido, para minimizar la asistencia de seguidores. Así, el 6 de julio de 2008, 40.000 seguidores barcelonistas (cifra que batía todas las previsiones de Laporta) acudían a votar la primera moción de censura en muchos años en Camp Barsa. Casi el 61% de los electores votaron por la dimisión de Laporta, apenas 5 puntos por debajo de lo exigido en los estatutos (66%). Así, ante lo escandaloso de la situación, 8 de los 17 miembros de la Junta Directiva de Laporta dimitieron, tratando de persuadir a éste de que hiciera lo propio, y facilitase la dirección del club hasta la convocatoria de nuevas elecciones. Laporta se negó a hacerlo, esgrimiendo el argumento técnico de que la Moción no había alcanzado el 66% requerido por los estatutos, ignorando el resto de factores.
Así, Laporta tuvo que nombrar a cuatro nuevos directivos para cumplir con los estatutos, para lo que contactaba con el entorno del anterior presidente Joan Gaspar. Años antes, Laporta había encabezado una fracasada moción de censura contra él.
Fue entonces cuando Laporta pensó que no quería más sustos. Bastante había tenido. Formada la nueva Junta, Joan Oliver, nuevo Director] General del FC Barcelona solicitó a una empresa especializada el seguimiento a los directivos Joan Boix, Joan Franquesa, Rafael Yuste y Jaume Ferrer, más allá de su actividad en el club, con el objeto de conocer qué directivos podrían rivalizar con Laporta de cara a las siguientes elecciones de 2010. El capítulo de escuchas ilegales quedaría tapado ante el buen juego del equipo, dónde explotaban seis jugadores de la cantera (Messi, Iniesta, Piqué, Puyol, Valdés y Busquets), llegados todos ellos al club antes de Laporta. El FC Barcelona completaba el mejor año de su historia, alzándose con el triplete por primera vez.
Aprovechando los éxitos del equipo, Laporta fue exacerbando el discurso nacionalista catalán, que años antes no había podido desarrollar de manera tan óptima por los problemas deportivos e institucionales.
Continuará...
MiB: Dana Mattioli on Amazon’s Everything War
Hace 3 días
2 comentarios:
Gran serie de entradas.
Estoy completamente de acuerdo contigo salvo en tildar de inútil al maldito Laporta. Un cochino catalanista enfermo de su propia leyenda, sí pero inútil no. Como perfectamente has relatado, Nuestro querido amigo no tenía ni oficio ni beneficio cuando fue nombrado presidente. Hoy, con una clase política catalana decadente, con un bachiller de Iznájar en el Poder y una oposición extremista liderada por un hijo de Guardia Civil de Teruel, hoy nuestro protagonista, se erige como el héroe de los "países catalanes". Sin hacer ruido y siempre bajo una apariencia de falsa elegancia se ha ido postulando para el puesto y o Dios lo remedia (y espero que lo remedie) o a no mucho tardar le veremos como President de la Generealitat.
Luis,
El post no pretende evaluar la ideología de Laporta, ni criticar su versión catalanista o independentista. Simplemente, su talento y su capacidad gestora. Y es en esta faceta dónde pretendemos argumentar que estos aspectos son muy discutibles y limitados.
Bajo su mandato, el Barcelona ha conseguido grandes éxitos, y esto es inegable. El problema es que, en su inmensa mayoría, esos éxitos han sido ajenos a los méritos de Laporta, quien ha tenido la osadía de utilizarlos en beneficio de sus opiniones políticas, de manera abiertamente usurpadora.
En Idiotsingracia hemso tratado el tema del nacionalismo catalán en otros post, pero éste no pretende tratar nada distinto a las verdaderas cualidades de Laporta.
Gracias por seguirnos Luis.
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