Frase del día

There are four imperatives for leaders: they must inspire trust, clarify purpose, align systems and unleash talent Stephen Covey

viernes, 5 de febrero de 2010

La resaca de la deuda (The Debt Hangover)

Os traemos algunos datos y gráficas interesantes del paper del Banco de Inglaterra, que os comentabámos el otro día. Nos sirven para exponer algunas ideas y preocupaciones:

En primer lugar el artículo habla de la caída y espectacular recuperación posterior de los mercados, algo casi inaúdito en la historia.

Aquí tenéis un gráfico comparando el comportamiento de esta crisis con las de 1929 y la de 1973.

Veamos esto con cifras aplicadas al sector financiero (el que ha sufrido mayor revés en esta crisis): entre Julio del 2007 y Marzo de 2009, las cotizaciones de bancos cayeron alrededor de un 75%. En ese momento, las pérdidas totales del S&P llevaban el mismo ritmo que durante la Gran Depresión.

Sin embargo, desde entonces las cotizaciones de los bancos han subido más de un 130%, recuperando más de la mitad de sus perdidas. Concretamente en Gran Bretaña subieron un 140%. Desde 1900, solo ha habido un período de 9 meses en los que la subida del sector financiero en Gran Bretaña fuera mayor.

La famosa "recuperación en V" parece que ha venido ocurriendo, aunque aún existe la posibilidad de que la recuperación acabe siendo en "W"...

La razón para esta recuperación sin precedentes, la encontramos en las brutales inyecciones y la política monetaria por parte de los Bancos Centrales de todo el mundo:

Estas políticas afectan al valor de los activos de 3 formas:
  1. La tasa de descuento a aplicar a los futuros flujos de caja se reduce. Debido a los bajos tipos de interés ofrecidos los bancos centrales las tasas de descuento exigidas a los proyectos bajan. Según el paper, un 20% de la subida en la zona euro es atribuible a este descenso de las tasas de descuento.
  2. La prima de riesgo que exigen los inversores también baja. Al diluirse el miedo de los mercados a una nueva Gran Depresión, el risk premium exigido se ha relajado.
  3. La prima de liquidez también desciende. Gracias al aumento de la liquidez en los mercados también se ha relajado la prima por liquidez que exigían los inversores durante la crisis.
Todo esto podría parecer maravilloso o inofensivo sino acarrease otros "efectos secundarios". En primer lugar, y como podéis ver, los principales elementos que han contribuido al rally de los mercados poco tienen que ver con un crecimento real de la economía. Algunos de los problemas de raíz por los que muchas acciones fueron castigadas al comienzo de la crisis siguen existiendo.

El resultado final de todas estas intervenciones es lo que los economistas llaman en inglés debt overhang (sobreendeudamiento). Los efectos de esta situación son bien conocidos, básicamente la deuda actúa como un impuesto: reduce los ingresos del prestatario, obliga a desestimar proyectos con VAN positivo, distorsiona los incentivos...

Al igual que ocurre con los impuestos, se puede aumentar la recaudación subiendo ligeramente las tasas, pero a partir de cierto nivel un aumento del impuesto conduce a una minoración de los ingresos.

La consecuencia de este sobreendeudamiento es una ralentización de toda la economía y no solo eso, sino que los riesgos asociados siguen siendo igual de difíciles de ponderar. De ahí que se hable muchas veces de la resaca de la deuda (hangover, convenientemente transponiendo overhang...).

Pues bien para que os hagáis una idea, de entre las economías del G7, el FMI pronostica que las deuda pública crezca desde el 80% del PIB en 2007 al 125% en 2014. El endeudamiento de los bancos creció vertiginosamente durante los años anteriores a la crisis, y a pesar de las recientes ampliaciones de capital (un tercio de las cuales son cortesía de los gobiernos), el endeudamiento de los bancos sigue en niveles históricos muy altos, entre 20 y 50 veces los fondos propios...

Según un reciente estudio de McKinsey, los ratios de deuda total (pública y privada) han crecido desde el 200% del PIB en 1990 al 330% en 2008.

Todo esto tiene un precio. Por el momento parece que hemos decidido tomarnos la aspirina de papá Estado para combatir esta resaca, pero el problema de la aspirina es que no cura la enfermedad, solo esconde los sintomas. Y al igual que ocurre con las intervenciones públicas, si se abusa de ella termina por no causar ningún efecto... y tomar más de las estrictamente recomendadas no solo es inútil, sino además nocivo...

Por el momento hemos mantenido los costes de intereses de esta deuda en niveles bajos gracias a las políticas de los bancos centrales, pero esto no puede durar indefinidamente pues pronto llegará el fantasma de la inflacción, además de la generación de nuevas burbujas...

Simplemente tratar de imaginar la carga que supondrá pagar toda esta deuda cuando las tasas de interés se normalicen...